UN ÉXITO DE CELEBRACIÓN CON TALLER DE DOBLAJE GRATUITO, PINCHOTEO Y MUCHAS RISAS
Hay muchas formas de que a uno le toque la lotería. El 22 de diciembre nosotros no nos hicimos multimillonarios, pero sí estuvimos de celebración, brindamos con sidra achampanada y el espíritu navideño invadió nuestro estudio.
No festejamos una lluvia de euros, sino un año más de trabajo y formación con los alumnos que a lo largo de 2016 han formado parte de los talleres y cursos de doblaje y locución de LA HABITACIÓN CON UNA CAMA.
Y podemos decir que nuestra segunda fiesta navideña ha resultado todo un éxito. ¡Muchísimas gracias a todos! Tuvimos un auténtico record de asistencia, nada menos que 40 personas nos acompañaron en este evento. Tenemos que reconocer que al principio nos asustamos un poco debido al elevado número de confirmaciones de asistencia, pero al final comprobamos que, aunque estuvimos apretados, esta cercanía ayudó a crear un clima inmejorable con mucha complicidad.
Queríamos hacer algo especial y se nos ocurrió la idea de regalar a los asistentes un taller de doblaje. Así que para no romper con la temática de estas fechas, elegimos una de esas películas que podríamos catalogar como míticas: Solo en casa.
Sin embargo, debido a unos “problemillas” de última hora, nuestros planes se truncaron al igual que los del protagonista de la película y tuvimos que improvisar. Suerte que la serie Friends vino en nuestra ayuda. Y así arrancamos el taller, viendo cómo nuestros estudiantes se convertían en la cómica pandilla neoyorquina integrada por Rachel, Mónica, Phoebe, Joey, Chandler y Ross.
Hay que reconocer que con tanto público da vértigo ponerse delante del micrófono, así que el grupo que salió a hacer el primer take se ganó un fuerte aplauso. Transcurridos los primeros minutos, algunos más recelosos, otros con gran decisión, asumieron su papel de actores y actrices de doblaje y al rato todos habían hecho ya unas cuantas escenas.
¿El resultado? Una variedad de registros, recursos interpretativos, sincronía y esfuerzo que a nosotros como profesores, y plagiando uno de los discursos más escuchados en nuestro país, “nos llena de orgullo y satisfacción”.
Tras casi dos horas de doblaje, llegó el momento del descanso. No todo va a ser trabajar y para que nuestros invitados repusieran fuerzas teníamos preparado un buen tentempié. Estos momentos de relax son unos de nuestros favoritos porque nos da la ocasión de hablar con nuestros alumnos, conocerlos mejor y ver cómo interactúan entre ellos y crean lazos.
Y así fue. Botella de cerveza en mano, con o sin alcohol (que había que conducir) se hicieron corrillos, el ambiente se animó, los gorros de Papa Noel aparecieron en las cabezas de todos como por arte de magia y el estudio ya no tenía nada que envidiar a una sala de fiestas.
El descanso se alargó y muchos de los asistentes se fueron despidiendo, de forma responsable, pues no hay que olvidar que el día siguiente era lectivo. Y ya cuando creíamos que la fiesta llegaba a su fin, el pequeño grupo que quedaba insistió en seguir doblando. Así que sus deseos fueron órdenes y como si de un milagro navideño se tratase la película de Solo en casa decidió contribuir y pudimos trabajar con ella. Durante una hora doblamos sus famosas escenas y disfrutamos como enanos. Y como quienes nos conocen saben que nos encanta la naturalidad, dejamos que las cosas fluyeran libremente, lo que llevó consigo un cambio de roles. Profesora y técnico fuimos sustituidos por alumnos y nosotros quedamos relegados a meros espectadores.
Si es que con tanta profesionalidad y calidad humana qué más se puede pedir. Así que descorchamos una botella de sidra, llenamos las copas y entre risas brindamos y dimos las gracias a nuestros alumnos por formar parte de nuestra escuela. Pero como en ese momento ya faltaba mucha gente y otros ni siquiera pudieron asistir a la fiesta, queremos repetiros el momento brindis. Así que alzad vuestras copas con nosotros y seguid leyendo:
«Chicos, os agradecemos de corazón vuestra participación, vuestro apoyo y vuestra energía. No podíamos estar más orgullosos de todos vosotros, no sólo por el trabajo que realizáis sino por las grandes personas que sois. Esperamos seguir creciendo juntos, porque ya sabéis que en LA HABITACIÓN CON UNA CAMA ¡nos consideramos una gran familia!»
¡FELICES FIESTAS!